Hace unos días Anvó era protagonista en un medio de comunicación local, ya que mantiene y crea nuevos proyectos de ayuda humanitaria. Hacemos frente al Covid19 en Senegal con alimentos y kits de higiene para los niños Talibe (ADY) y con 6 toneladas de arroz para los pueblos Sereres y Peuls junto a la construcción de un depósito de agua. Gracias a todos los burgaleses.
Transcripción de la nota de prensa relativa a Anvó:
Si algo nos ha dejado claro esta pandemia es que lo que pasa en un extremo del planeta nos afecta como sociedad globalizada, aunque estemos a kilómetros de distancia y nos creamos inmunes por vivir en un Estado del Bienestar. El coronavirus ha demostrado que no distingue entre sociedades ricas y pobres, aunque sí lo hacen sus consecuencias: «La covid-19 afecta igual a nivel de salud, pero no en lo social. Las desigualdades se agravan si quienes tienen que luchar contra la enfermedad lo han de hacer también contra el hambre o si no tienen agua potable», resume Carmen Díaz, de Anvó Africam, ONG burgalesa que trabaja en Senegal.
En medio de esta pandemia también están construyendo un depósito de agua con una capacidad de 60 m3 a partir de paneles solares para un pueblo con 1.100 habitantes y 10 campos agrícolas.
En ese país africano hay hasta la fecha 25 fallecidos y 2.310 casos confirmados. El confinamiento ha dejado sin posibilidad de acceder a un poco de alimento a los niños talibé que viven en la calle y comen de lo que consiguen mendigando. Por eso la ONG burgalesa puso en marcha en abril un proyecto de ayuda humanitaria urgente con alimentos y kits de higiene para 120 niños y jóvenes. «Con las cuotas de los socios y las donaciones de los burgaleses Anvó participa con alimentos como aceite, pasta, legumbres, tomate, conservas de pescado, etc. y con productos como lejía, jabón e hidrogeles haciendo posible que estos chicos permanezcan sin salir a la calle al tener las necesidades cubiertas».
También ayudan a las comunidades rurales nómadas repartiendo 6 toneladas de arroz para los pueblos serérés y los peuls: «La ayuda alimentaria es imprescindible porque no pueden comprar y vender en los mercados», subraya Carmen, que recuerda que la cooperación internacional además de una obligación «para no abrir una mayor brecha de desigualdad es necesaria para que nadie tenga que inmigrar por no tener qué comer».
